sábado, 5 de febrero de 2011

Cielos Congelados

Bajo los cielos congelados de esta estúpida cuidad, que se esconde como una larva asustada entre la grandeza de su paisaje, aprendo a que el frío no se lleve lo poco que queda ya de mi inocencia, ese arrugado tubo de dentífrico que aprietas haciéndote polvo los dedos para apenas extraer la cantidad suficiente para un cepillado. Por ser tan sabio, me he vuelto tonto, y ahora sólo quiero que las flores de mi juventud me vuelvan a mentir con sus voces de niñas sonrojadas, que me lleven a donde los deseos no se diseñan con escuadra y cartabón.

Bajo la nieve fina de éste firmamento irrespirable, escucho en silencio mi propio espíritu, al que apenas le había prestado atención desde que el ruido de "mi futuro" se adueñara de todos los pasos que estoy dando. Únicamente dentro de mi alma lograré encontrar los retales de mi propia sabiduría, la que me ha curtido durante décadas y que será tan desastrosa como la de cualquiera, pero es la mía, y no estoy dispuesto a que nadie se ría de ella, ni siquiera yo, que soy muy dado a pensar que tengo mucha gracia.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Cada vez me cuesta mas tomar aire,cada vez me cuesta mas quemar el oxigeno.
Como un niño que ha perdido de vista a su madre sigo caminando mis caminos,creo que son cuatro o cinco de un color naranja amarronado con ápices de verde,azul y blanco. Unas veces brillan y resplandecen, otras llueve y se estremecen, no soy el único que los transita,entre selvas de ladrillo y cenizas me cruzo con mas caminantes que tratan de coger todo lo que pueden de mis estantes,hay espacio suficiente aun asi,y no lo entiendo,se pisan unos a otros supongo que envidian unos zapatos mas caros y lujosos. Algunos me roban un poco de mi aire,ladrones contaminados que necesitan el oxigeno de los hombres planta para alimentar sus estrechos y maltrechos tallos, y es en ese momento cuando me tomo unos segundos para subir al cielo y arrancar una bocanada de aliento que me devuelva a la tierra, asustado por el vertigo,la inmensidad del océano, el frío gelico.Cierro los ojos busco con el tacto la suavidad de las nubes,me agarro y tomo una parte de ellas que sirve de alimento a mis pulmones y anestésico a mi corazón.
Vuelvo a mis caminos y descubro que me siento bien allí arriba ,en el cielo, es él quien da brillo a mis caminos,quien los humedece,los enfría y calienta,es él quien alimenta mi espiritu, miro hacia arriba pero ¡no¡,está muy alto, podría caerme sobre otro rumbo,otro camino,podria cambiar mi destino, la gente se enfadaría. Miro hacia adelante¿por donde voy? a si¡¡ ya me acuerdo es el camino de casa, en ese momento alguien al que no le importo nada se choca con mi hombro,un contacto que habría evitado, no le doy importancia pero él si,se enfada,me mira mal,escupe culpando al suelo,es un guerrero contaminado un tallo maltrecho,quema mi oxigeno, ya no me queda suficiente para llegar a casa,me llama un recuerdo, la paz que senti en el cielo,cierro los ojos y subo con los brazos extendidos,toco las nubes,me sujetan entre los dedos,respiro y muerdo el aire,esta fresco ,me sienta bien,me relaja, baila con migo,mis brazos danzan el ritmo preferido de las corrientes pero no veo,esta muy alto,si abriera mis ojos el vértigo me tiraria ¡tengo que descender ya¡¡ a mitad de camino vuelvo a estirar mis brazos ¿podría tocar las nubes una vez mas? ¿me daria tiempo? mis parpados están cansados,como dos candados en la verja de un comercio abandonado,llevan mucho tiempo apretados,necesito volver a mis caminos alguien me los podría quitar,mi rostro sigue mis manos,apuntan al cielo estoy cansado tengo que subir o bajar,se están relajando,mis pestañas dejan una fina rendija por la que entra la inmensa claridad del cielo,la misma que baña la tierra,siento el aire perturbando mi cristalino ahora no queda ni una sola parte de mi cuerpo que no conozca el viento, están completamente abiertos ¡incluso parpadean¡,sigo mirando al cielo,ascendiendo hacia él,estoy muy lejos de mis caminos el vertigo seria terrorífico si mirase hacia abajo, ya puedo tocar las nubes, hay luz por todas partes,huele bien,no hay contaminacion,veo compañeros que no me hacen el vacio,me hacen un hueco,mis pulmones se sienten jóvenes y limpios, mi corazón se calma, el frío es acojedor,estoy por encima de las nubes, quiero sentirlas más,me tumbo,veo combinaciones de colores que jamás han alcanzado la tierra,no estoy cansado es fabuloso, la nube me arropa y me calienta,me gustaría dormir,ya no tengo vértigo, no veo el suelo ¿y mis caminos? seguirán siendo transitados, me encargare de bañarlos con mi luz y mi yanto.Ahora soy mas aire que nunca,soy cielo, mi aliento se mezcla entre brumas de vapor,mi corazón se calma y mi espiritu vuela.

Jose M.Camacho dijo...

Gracias por compartir ese mundo interior... En ocasiones lo veo rugoso y muy muy caliente... siempre habrá un hueco aqui para tus palabras y también en mis orejas cuando estemos cara a cara. Con fuerza y esperanza llegaremos a tocar las nubes limpias que tanto ansiamos.